Ciudades 5.0

En una de las escenas más recordadas de la película La vida de Brian, uno de los personajes, crítico con el proceso de romanización de su ciudad, pregunta a sus colegas con cierta ironía qué han hecho los romanos por los vecinos. Sin embargo, como la respuesta no es la que esperaba, no le queda más remedio que reconocer las aportaciones de los dirigentes: “Bueno, pero aparte del alcantarillado, la sanidad, la enseñanza, el vino, el orden público, el control de las plagas, las carreteras y los baños públicos, ¿qué han hecho los romanos por nosotros?”.

Desde una perspectiva sostenible, las ciudades romanas podrían considerarse ciudades inteligentes, porque ponían la tecnología al servicio de los ciudadanos para facilitarles el día a día, con hitos como los acueductos o el sistema de evacuación de aguas residuales, por ejemplo.

En la actualidad, una ciudad inteligente es aquella que busca mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos a través de la tecnología. La ciudad 5.0 ofrece más espacios públicos, controla los niveles aceptables de contaminación y residuos a través de datos en tiempo real, impulsa la sostenibilidad y fomenta la participación de los vecinos.

Conectados a la ciudad

Las ciudades inteligentes ofrecen datos relevantes actualizados al instante: estado del tráfico, niveles de contaminación o calidad del aire por zonas. Desde tu teléfono o tu reloj, puedes recibir información precisa para elegir la ruta más rápida, saber a qué hora llega tu autobús o visitar esa exposición tan interesante sobre cine bengalí.

Ciudades que brillan, pero de forma sostenible

En algunas ciudades se ha empezado a probar el alumbrado inteligente. La idea puede suponer un importante ahorro energético. Las luminarias detectan si hay movimiento alrededor. Si no hay nadie, la luminaria reduce la intensidad, pero cuando se acerca un vehículo o un vecino se ilumina. En Londres los semáforos ya se autorregulan de manera autónoma y eficiente. Además, en un futuro, podrán detectar ambulancias o coches de bomberos de servicio y darles prioridad.

Pregúntate qué puedes hacer tú por tu ciudad

En Barcelona, por ejemplo, los vecinos pueden informar a las autoridades competentes en todo momento para mejorar la gestión de cualquier servicio público: un contenedor lleno, una luminaria que no alumbra o un socavón en el pavimento. También disponen de buzones digitales donde se pueden compartir ideas o propuestas y hacer que su ciudad sea aún más 5.0.

Un Plan Verde siempre es un gran plan

Ciudad de México ha lanzado el Plan Verde, una iniciativa para mejorar la sostenibilidad de la capital en la que participan distintos organismos y jefaturas, como Turismo, Salud o Sanidad. Sus objetivos principales son proteger las reservas naturales, construir más espacios públicos, fomentar el transporte sostenible, mejorar la calidad del aire o reducir la contaminación.

Inteligencia ciudadana

Según la Organización de las Naciones Unidas, más del 50% de la población mundial vive en ciudades, y se espera que esta cifra llegue a los dos tercios de la población en 2050. Por eso, creo que lo verdaderamente inteligente es empezar a diseñar juntos el espacio en el que queremos vivir. La implicación ciudadana debe ser clave para crear ciudades plurales, sostenibles y cada vez más conectadas. Y es que detrás de una gran ciudad siempre hay unos vecinos excelentes.