Sostenibles y humanas: las exigencias de la Generación Z que están revolucionando nuestro consumo.
La generación Z aglutina a quienes nacieron entre 1994 y 2010; una generación nativa digital, que tuvo que adaptarse a un mundo cambiante, donde la incertidumbre y la inestabilidad se convertían en endémicas tras las sucesivas crisis que vivieron.
No es ningún secreto decir que los consumidores de la generación Z tienen más conciencia en lo que refiere a cuestiones medioambientales y prácticas sostenibles que otras generaciones, siendo tres cuartas partes de los miembros de esta generación los que anteponen la sostenibilidad a la marca en sus decisiones de compra.
“Una generación que lo comparte todo”. La Gen Z reivindica públicamente cambios acordes a sus valores y esto tiene consecuencias directas: están influyendo en los hábitos de compra de sus mayores.
Es el caso de mi sobrina Valentina, la cual a sus 20 años de edad, cuando el invierno pasado yo necesitaba una nueva chaqueta, me planteó una infinidad de posibilidades eco friendly y, no solo eso, ¡económicas!. Y he de confesar que a nivel personal, me sentí un poquito mejor tras elegir una alternativa sostenible.
Muchas marcas se están sumando a la ola de la sostenibilidad por conveniencia, realizando el tan conocido ‘greenwashing’, una práctica con objetivos puramente de marketing para parecer sostenibles sin serlo. Es decir, poner una etiqueta verde en tu packaging y seguir usando ingredientes insostenibles… ¿Te suena?
Los zetas no buscan marcas idílicas, sino marcas humanas y coherentes que reconozcan sus errores y acepten los cambios que tienen que hacer para conseguir ser mejores.
Nos queda mucho que aprender de esta generación en términos de consumo sustentable, pero ¿por qué no empezamos por unirnos todas las generaciones para exigir a las marcas comportamientos realmente sostenibles?